Death March kara Hajimaru Isekai Kyusoukyoku (NL)

Volumen 4

Capítulo 1: Disturbio al Amanecer

Parte 2

Al día siguiente, nos preparamos para partir temprano al amanecer y nos dirigimos al fuerte justo como el sol elevándose.

―Hey, eres el chico de ayer. He escuchado que la Baronía Muno está en tal pobreza desesperada que los ladrones de ahí han estado viniendo a este camino en su lugar. Debes ser cuidadoso, no solo con los bandidos y soldados, sino incluso con los aldeanos ordinarios.

―Lo haremos. Gracias por su consejo.

Whoa, equipar a los soldados de la Baronía Muno con bandidos sin siquiera pestañear, hice una broma mentalmente. Mi respuesta verbal fue simplemente agradecer al soldado por su amabilidad. Aparentemente, no hay ninguna tarifa por cruzar la barrera.

Por el contrario…

―Si encuentras cualquier demanda irrazonable del otro lado del fuerte, vuelve aquí. Una vez que cruces la frontera, nuestros soldados vendrán en tu ayuda.

―Aprecio su consejo. Si cualquier cosa ocurre, estoy seguro que aceptare su amable oferta.

Agradeciendo al soldado otra vez, arrancamos el carruaje hacia la Baronía.

Mientras conducía, pensé en los rumores que escuché en Ciudad Sedum acerca de la Baronía Muno.

El territorio había sido siempre peligroso, pero gracias a una hambruna que se había prolongado durante los últimos tres años, la mayor parte de la población había caído en la esclavitud o se volvieron criminales.

No solo había fraude y malversación por parte de funcionarios de gobierno volviéndose estándar ahí, pero la negligencia de los soldados significaba que el camino principal estaba a rebosar con monstruos y bandidos.

La fortaleza de la frontera que estaríamos pasando a continuación sería tan mala, con canallas que tomarían toda tu carga bajo el pretexto de una “Tarifa” o secuestrarían mujeres de los pueblos cercanos.

La razón por la que estaríamos dejando la Baronía Muno tan temprano en la mañana era para tratar de evitar a esos desagradables soldados.

Esos lamentables hombres no solían ir a trabajar tan temprano, y sabía que no existía una barrera en la Baronía Muno del lado de la fortaleza.

Tenía algo de alcohol para usar como soborno por si acaso, pero supongo que si cualquiera se aproxima a nosotros de la manera equivocada, puedo hacer que Arisa ponga a todos a dormir con Magia Psíquica e ir a través.

Los vagos soldados se duermen en el trabajo todo el tiempo, después de todo.

Una vez que salimos del fuerte del lado del Condado Kuhanou, nos encontramos viajando a través de un estrecho camino acuñado entre empinados acantilados en ambos flancos. Era apenas suficientemente ancho para dos carruajes pasando el uno al otro, y la visibilidad era bastante pobre.

Después de continuar a través de este barranco por diez minutos o más, llegamos a la parte más accidentada de la frontera.

Frente a nosotros había un valle de aproximadamente treinta metros de ancho y trescientos metros de profundidad, junto con un puente de cuerdas apenas suficientemente ancho para un carruaje. La Baronía Muno esperaba del otro lado.

―Liza, Nana, regresen. Esperen aquí con todas las demás, por favor.

Llamé a Liza y Nana antes de que cruzaran sobre sus caballos delante de nosotros, y regresaron a esperar con el resto del grupo.

―Iré a asegurarme que sea seguro del otro lado. Si les digo que corran, no esperen por mi—solo hagan una pausa para eso, ¿Muy bien?

―¡Kay!

―¡Si, nano desu!

―…Co-correcto.

Pochi, Tama, y Lulú fueron las únicas tres quienes obedientemente aceptaron.

―Satou.

―No vas a hacer alguna locura por tu cuenta otra vez, ¿Verdad?

Mia y Arisa estaban ansiosas por detenerme.

―No se preocupen. Volveré tan pronto como vea que el fuerte ahí es similar.

Acaricié sus cabezas, luego dejé a Lulú como el cochero y de un salto bajé del carruaje.

―Maestro, permítame acompañarlo, yo suplico.

―Perdone mi presunción, maestro, pero por favor permítame unírmele como su guardia.

Nana y Liza querían venir, pero decidí minimizar el número de personas y traer solo a Liza. Si cualquier cosa ocurre, estoy seguro que ella podría cuidar de sí misma.

―Muy bien, Liza, ven conmigo. Nana, tu espera aquí.

―Sí, maestro.

―Entiendo, yo respondo.

Tomé el caballo de Nana, y Liza y yo cruzamos de manera segura el puente de cuerdas.

En el otro lado había una plaza con suficiente espacio para estacionar unos cuantos carruajes y unos 45 metros de muro de rocas que bloqueaba mi vista más allá de el.

Ahora, es tiempo de recolectar algo de información.

Selecciono [Búsqueda Completa del Mapa] del menú magia como punto de partida y aprendí acerca de la Baronía Muno.

Sabía que el área era grande, pero todavía estaba sorprendido por lo extensa que era. Su extraña forma me lo hacía difícil de decir, pero diría que al menos era del tamaño de Hokkaido. Sin embargo, eso era una estimación aproximada, ya que actualmente no recuerdo que tan grande es Hokkaido.

El territorio entero era relativamente plano, y al noroeste de Ciudad Muno había un bosque que cubría aproximadamente el treinta por ciento del territorio. Los ríos se reunían en un lago en el centro del bosque, luego continuaban por un gran rio que pasaba por Ciudad Muno hacia el Condado Ougoch.

La carretera principal que conecta el Condado Kuhanou y el Ducado Ougoch corría principalmente a lo largo de llanos, excepto por unas cuantas montañas bajas.

Por el otro lado, una gama de montañas más altas bordeaban la Baronía.

Como el Condado Kuhanou, este mapa del área también tiene unas cuantas zonas blancas de varios tamaños. La más grande se localiza dentro del gran bosque.

Ahora que obtuve un entendimiento básico de la geografía, me dediqué a investigar presencias enemigas y perfeccionar los parámetros de búsqueda del mapa.

Primero comprobé si había algún reencarnado con [Habilidades: Desconocidas] como Arisa— Ninguno.

A continuación, cualquiera sobre el nivel 50…… También ninguno.

Luego, cualquiera sobre el nivel 30 podría ser un problema para las chicas—Esta vez hubo resultados.

Varios objetivos se ajustaban a mis parámetros. Y el más cercano estaba en el fuerte delante de nosotros.

El resto estaba bastante lejos, así que suspendí mi búsqueda por ahora y traje a Liza conmigo para mirar de cerca.

Siguiendo el camino que cortaba a través de la cara de la roca, llegamos a una ladera desierta.

El fuerte estaba en el medio de la región árida, y sentada en la cima de la estructura medio aplastada estaba una hidra. Sus cuatro cabezas estaban inspeccionando alrededor bajo los escombros.

El frio, seco viento trajo el crujido de enormes dientes royendo algo.

Revisé el mapa, pero no había sobrevivientes cercanos.

―Liza, cuida de mi caballo, por favor.

Dejando a Liza a cargo del animal, comencé a descender la ladera.

La hidra sentada, estaba a aproximadamente 300 metros de mi en línea recta.

Esa cosa era nivel 44 y cerca de dos veces más grande que la que vi entre el Condado Seiryuu y el Condado Kuhanou.

―Maestro, por favor perdone mi arrogancia, pero creo que realmente debemos retirarnos en esta situación.

Liza miró, pálida, a la enorme bestia que podría haber estado bien en una película de monstruos.

―No te preocupes. Solo tomará un minuto, así que espera aquí.

Para aliviar las preocupaciones de Liza, decidí mostrarle un poco de mi verdadera fuerza. Imaginó que ella puede guardar un secreto, así que debería estar bien.

Una vez que estaba un poco más lejos de Liza, elegí el hechizo ‘Flecha Mágica’ de mi menú magia.

Ya que este era un campo sin cultivar, probablemente podría haber usado ‘Disparo de Fuego’ sin problema, pero ya que el hechizo se mueve a aproximadamente a 88 kilómetros por hora, había un riesgo de que la hidra pudiera esquivar a esta distancia.

Así que, elegí el ligeramente más rápido ‘Flecha Mágica’ esta vez.

Cuando activé el hechizo, un menú apareció para dejarme seleccionar cuantas flechas disparar. Podía elegir cualquier número entre uno y ciento veinte. Sin vacilación, elegí el máximo.

Un pequeño círculo rojo apareció sobre la hidra en mi pantalla AR, al igual que una marca de objetivo en un simulador de batalla aérea.

Sin embargo, ya que sus cabezas están actualmente escondidas, mi ataque podría no ser fatal.

Deliberadamente he pateado uno de las rocas a mis pies para llamar la atención de la hidra.

El monstruo levantó sus cuatro cabezas y elevó sus alas como de murciélago en una postura intimidatoria.

Cuando me concentré en las cuatro cabezas de la hidra en mi mente, la marca de objetivo cambió instantáneamente para reflejar mis pensamientos.

Fuego.

Mentalmente presioné el gatillo.

El hechizo consume setenta puntos de magia, rayos mágicos del tamaño de pequeñas lanzas aparecen frente a mí y son disparados a la hidra en rápida sucesión con una fuerte explosión.

No estaba seguro si era debido a mi alto nivel o estadísticas o alguna habilidad, pero el tiempo parecía tan lento que parecía que estaba viendo fotograma a fotograma.

La primer ‘Flecha Mágica’ fue bloqueada cuando la hidra produjo una membrana roja alrededor de su cuerpo. Las flechas dos y tres golpearon la membrana, la cuarta la perforó, y la quinta flecha perforó directamente una de las cabezas de la hidra.

Antes de que el impacto pudiera mover su cabeza, la sexta y séptima flecha la redujeron a pedazos.

Desde la octava flecha, el único efecto que ofrecían era el de salpicar los restos de la cabeza hasta que no quedó nada.

Las flechas que habían golpeado el objetivo continuamente, pulverizaron los árboles muertos, el suelo, y rocas detrás de ella hasta que el paisaje estaba completamente cambiado.

Fue una gran muestra de violencia, como si hubiera sido disparado un cañón automático de gran calibre.

Después de que las 120 flechas terminaran de aniquilar las cuatro cabezas de la hidra y las montañas detrás de ella, el flujo del tiempo alrededor de mí finalmente regresó a su habitual velocidad.

Presionando una mano contra mis oídos en caso de ruptura de tímpano, revisé el Registro para confirmar la muerte de la hidra.

Habiendo perdido todas sus cabezas, el resto de la hidra fue arrojada hacia atrás, destruyendo la mitad restante del fuerte. Los temblores posteriores, gracias a su inmenso peso reverberó a través de mi estómago.

Cubrí mi boca con una tela para proteger mi garganta del polvo en el viento.

Regresé con Liza, quien estaba atónita y sin habla.

―Se acabó. ── Le dije.

―Maestro, por favor perdone mis absurdos comentarios anteriores. Mientras que sabía que usted era fuerte, nunca imaginé este grado de……

Casualmente silencié la dramática muestra de sorpresa de Liza.

―Perdón, pero, ¿Podrías mantener esa magia como secreto para las otras?

―Sí, incluso si eso me cuesta la vida.

Ok, no tienes que tomarlo tan seriamente.

―No, si tu vida está en juego por alguna razón, por favor diles.

Acepté las riendas de parte de Liza y monté el caballo hasta el cadáver de la hidra.

De cerca, la inmensa criatura era realmente impresionante. Si estuviera en mi mundo original, probablemente hubiera sido comido antes de poder incluso pensar en correr.

En medio de los escombros manchados de un marrón-rojizo, estaban cuerpos y armas rotas.

A pesar que me habían dicho que este era un punto de reunión para inútiles, no podía evitar sentir lástima por sus terribles muertes.

No era suficiente para hacerme enterrar sus cuerpos, pero podía al menos tener un momento de oración en silencio por ellos antes de dejarlos.

Nos movimos sobre el suelo empapado de sangre, bajándonos delante del fuerte que ahora era la tumba de la hidra.

Una vez que aterricé en el suelo, el ligero olor de hierro en el aire se volvió un hedor.

Le pedí a Liza que recuperara el núcleo de monstruo, luego recuperé una de las espadas tiradas a mis pies y la hundí en el suelo como una lápida.

Luego saqué una botella de licor para usarlo en ritos funerarios—muy lejos de su propósito original. Originalmente lo compré en caso de que necesitara sobornar durante mi camino pasando este fuerte.

Rociando el líquido sobre la espada, recé para que sus almas descansaran en paz.

Mientras Liza obtenía el núcleo, continué mi investigación de la Baronía Muno.

Regresando a la búsqueda de enemigos, descubrí un número relativamente alto de monstruos nivel 30 y superior.

En el área de las montañas al oeste-suroeste de aquí, había más hidras como la que había justo había derrotado. Mi búsqueda me había regresado solo una hidra nivel 37, pero en una investigación más cercana, había dos hidras más de nivel 29 y 24 ahí también.

El área estaba prácticamente al otro lado del territorio desde donde estamos ahora. ¿Así que la hidra viajó todo el camino desde ahí? No sé cuál sea la velocidad crucero promedio de un monstruo volador, pero podría ser problemático.

No tendría ningún problema tratando con ellas, ya que tengo un hechizo antiaéreo ahora.

La mayoría de ellas viven en las montañas lejos de la carretera o asentamientos humanos de todas formas, así que probablemente no nos encontraremos ninguna.

También encontré un único demonio en la lista. Además, estaba localizado en el castillo del Lord en Ciudad Muno. Lo más probable, el había empleado un perverso complot que fue el responsable de la caída de este territorio.

Examiné la información detallada acerca del demonio. Era nivel 35, un demonio menor como el globo ocular que había enfrentado en Ciudad Seiryuu. Las habilidades específicas a su raza eran ‘Vuelo’, ‘Transformación’, ‘Doppelgänger [1]’, y ‘Resistencia a la Magia Menor’, mientras que sus habilidades generales eran ‘Magia Psíquica’ y ‘Magia Fantasma.’

Esta vez, busqué específicamente por demonios y encontré otros tres. Todos ellos eran nivel 1, con el título [Doppelgänger]. Ellos deben haber sido creados por el fuerte demonio y su habilidad de nombre idéntico.

Esas copias tenían las mismas habilidades específicas como el otro demonio salvado por ‘Doppelgänger,’ a pesar que solo tenían una habilidad general entre ‘Magia Psíquica’ o ‘Magia Fantasma.’

Uno estaba en Ciudad Muno, y los otros dos estaban en diferentes ciudades. El que se había infiltrado en Ciudad Muno estaba actuando como un juez, entre otras cosas. Tengo que ser cuidadoso con ese chico.

Pensando en eso, el demonio en Ciudad Seiryuu había poseído a un humano…

Solo para estar seguro, busqué en el mapa por personas con el estatus [Poseído] y encontré dos caballeros.

Estos eran caballeros de alto nivel que se encontraban en el castillo, pero después de un poco de comparación, me di cuenta que habían sido elegidos debido a que tenían más delitos en su campo de [Recompensas]. Esto tiene sentido, ya que el chico poseído en Ciudad Seiryuu era un villano también.

A menos que ellos representaran una amenaza para mis niñas, no tengo intención de exponerme deliberadamente para derrotarlos, pero sería otra historia si cualquiera de ellos se cruza en nuestro camino como la hidra. En ese caso, usaré mi poder total para encargarme de ellos.

Sería un gran dolor si el demonio menor terminaba convocando un gran demonio y repitiendo el incidente del laberinto en Ciudad Seiryuu, así que puse una marca en todos los demonios y caballeros poseídos para así saber si ellos se dirigían a cualquier lugar sospechoso.

Durante nuestra estadía en la Baronía Muno, decidí que sería mejor comprobar la situación en el mapa al menos dos veces al día, una en la mañana y otra en la noche.

Si hubiera cualquier signo de peligro, podríamos hacer nuestro movimiento.

Pero, por supuesto, la seguridad de las chicas bajo mi cuidado viene primero.

Cuando terminaba mi investigación de los demonios, Liza regresó.

―Maestro, he recuperado el núcleo.

―Genial, gracias.

Acepté el núcleo y lo deslicé dentro de una bolsa en la silla de montar de los caballos. Era de un rojo profundo, aproximadamente dos veces el tamaño de una pelota. Examinando el grado, descubrí que era de muy alta calidad.

―Voy a tomar un pequeño descanso. ¿Te importaría llamar a todas las demás?

―Si, enseguida.

Después de darle instrucciones a Liza, recordé a la enorme y medio enterrada hidra en los escombros de la fortaleza.

―No quiero preocupar a todas, así que mantengamos este monstruo en secreto.

―Ciertamente, señor.

Liza asintió dócilmente, luego montó su caballo y salió a llamar a las demás.

Después de verla salir, volví a la recolección de información.

Esta vez, miré el destinatario de la carta que había recibido de la vieja bruja del Bosque de las Ilusiones para entregarla.

Cuando busqué por gigantes, encontré solo un resultado. Estaba cerca del área en blanco en el gran bosque, así que supuse que el pueblo de los gigantes estaba probablemente ahí.

La torre de la vieja bruja en el Condado Kuhanou estaba en un espacio en blanco también, después de todo.

Probablemente podríamos recorrer la mayoría del camino en el carruaje, pero si queríamos viajar en el camino lateral que se dirige al bosque, tendríamos que tomar caballos individuales o ir a pie. Un vistazo al mapa de visualización 3D confirmó esta sospecha. El camino lateral estaba a unos doce días de viaje.

A continuación, estudié la distribución de personas.

La población era terriblemente pequeña. A pesar que la Baronía era mucho más grande que el Condado Seiryuu, había muchas menos personas. La Ciudad Muno era el único lugar con más de diez mil personas; las otras ciudades y pueblos se componían de solo unos cuantos miles a lo mucho.

Había varios pueblos a lo largo del camino principal y la frontera, pero la mayoría de ellos tenían solo alrededor de cincuenta personas.

Y, coincidiendo con la información previa que obtuve acerca de este lugar, en muchas de las condiciones de los plebeyos se leía [Hambriento].

La discriminación contra semi-humanos en la Baronía Muno era tan severa que no había ninguno en Ciudad Muno, e incluso en las otras ciudades y pueblos estaban completamente separados.

Entre las montañas más distantes desde la carretera, había un puñado de pequeños asentamientos con menos de cien semi-humanos de la misma variedad.

Además, había una ‘Ciudad Minera Abandonada’, habitada por kobolds, en las montañas cerca de la frontera oeste-noroeste. Ellos pertenecían al mismo clan que los que atacaron las minas de plata en el Condado Kuhanou. La distancia entre los dos era de casi 48 kilómetros, así que estaba impresionado de que hubieran tomado tal expedición.

En cualquier caso, la hambruna era incluso más severa de lo que esperaba.

Si pudieran utilizar esta hidra como comida, probablemente muchas vidas podrían ser salvadas, al igual que lo hicieron con la caza de ballenas en Japón después de la segunda guerra mundial…

¿Quizá podría ser comestible? La carne de la rana monstruo y los lobos cohete eran deliciosos, y podríamos conocer a alguien que sepa como cocinarla.

Cada uno de los cuellos de la hidra era tan grueso como el cuerpo de un caballo. Corté uno de ellos en rebanadas de aproximadamente 90 centímetros con la [Espada Sagrada Excalibur] y los puse en Almacenamiento.

Guardé el resto del cuerpo también, por supuesto.

Repentinamente, recordé lo que hidra había estado comiendo, revisé los detalles del cadáver en Almacenamiento. Era posible remover el contenido del estómago por separado.

Usando el hechizo ‘Trampa’, hice un agujero de aproximadamente 5 metros de ancho y profundidad.

Vacié el contenido en el agujero: los cuerpos de las victimas del fuerte. Sabía que no quería ver el estado en que se encontraban, así que aparté mis ojos.

Me moví lejos hasta que no era capaz de ver que había dentro del agujero, ofrecí otro momento de silencio por las víctimas, y dejé el fuerte.

＞＞＞ Título Obtenido 「Sepulturero」

Después de descender la ladera delante del fuerte, desmonté mi caballo aproximadamente a 9 metros de distancia y esperé por todas.

Tomé un profundo respiro de aire seco, luego lo liberé lentamente, esperando disipar las emociones que se habían posado sobre mi corazón como oxido.

Habiendo estado en este mundo paralelo por un tiempo, debería haberlo usado para encontrar la muerte por ahora, pero todavía no se siente bien.

Cuando Lulú y Arisa me saludaron desde el asiento del cochero, regresé el gesto mientras trataba de empujarme y correr hacia el carruaje.

[1] Básicamente se trata un doble o una copia de uno mismo.