Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 5: Explosión Kouma, LET’S GO!

Capítulo 5: ¡Lanzando una Explosión de Fuego con este Maldito Artefacto!

Parte 5

Un hombre del clan de la Magia Carmesí se posicionó ante Silvia. Tenía una expresión muy triste…

—Silvia, es una lástima que hayas acabado así… Al menos déjame utilizar mi ataque definitivo~ ¡aaaaaah! ¡Quema! ¡Es de mala educación interrumpir a alguien cuando está soltando una frase épica, Silvia!

Ni siquiera le dio tiempo a terminar antes de que Silvia le escupiera fuego. El hombre saltó hacia un lado en pánico.

—¡No quiero seguir más con esto! ¡Si no quieres luchar, entonces lárgate!

Silvia había perdido completamente los nervios después de que el clan de la Magia Carmesí hubiese estado jugando con ella en repetidas ocasiones. En ese momento se encontraba a bastante distancia del almacén, por lo que esa era una buena oportunidad. Yo en el fondo quería escapar, pero no pude seguir mis instintos por la culpa que me invadía después de haber provocado toda esta situación.

—¡De acuerdo, adelante! ¡Oye Darkness, cuento contigo por si las cosas se ponen peligrosas para el clan de la Magia Carmesí! No importa lo fuertes que sean, al fin y al cabo solo son magos y no podrán escapar cuando se les agote el maná.

—¡Entendido, yo me encargo!

Darkness asintió con firmeza. Y Megumin, que estaba detrás de ella…

—¿Qué, qué debería hacer yo? No puedo usar teletransporte, por lo que ni siquiera sería capaz de conseguir tiempo…

Habló con una expresión preocupada.

—Tú serás nuestro último recurso cuando llegue el momento más crítico. El Asesino de Magos tan solo tiene resistencia a la magia, ¿verdad? Puede que la magia avanzada no sea efectiva, pero nadie ha probado todavía luchar con explosiones, ¿no? Es posible que el conjuro de explosión sea capaz de hacerle algo de daño.

Utilicé esa excusa para mentirle a Megumin. Para ser sincero, nunca pensé en dejarle usar su conjuro de explosión. Yunyun me dijo que habría problemas si los aldeanos se enteraban de que Megumin había aprendido este hechizo. Aprovechando que en ese momento el clan de la Magia Carmesí tenía a Silvia ocupada…

—¡Ajajaja, ¿qué pasa?! ¡Vamos, usen su magia de teletransporte!

—¡Maldición, los encantamientos no están…! ¡Eh, las cosas se están poniendo complicadas! ¡Los movimientos de Silvia se han hecho más ágiles!

…Silvia había conseguido acostumbrarse a su cuerpo y ya no se encontraba a merced de los miembros del clan, por lo que comenzó a atacar de forma activa.

—Kazuma, yo me quedaré haciendo guardia a la entrada del almacén, así que no te preocupes y entra a buscar.

—¡Todavía sigues diciendo sandeces, ven conmigo!

Tuve que arrastrar a Aqua porque no dejó de intentar escaquearse hasta el último momento. Utilicé Ocultar para avanzar entre el fuego cruzado de hechizos. Por fin conseguimos llegar al almacén, y entramos por el túnel que había hecho Silvia a través del suelo. Miré una última vez a la mujer monstruosa y vi que seguía persiguiendo a los miembros del clan. Ya quedaba poco para el amanecer, por lo que el cielo al otro lado de la colina se estaba haciendo cada vez más claro. Sin embargo, el interior del almacén seguía siendo igual de oscuro. Tanto Aqua como yo podíamos ver en la oscuridad y nos adentramos en busca de aquella arma…

—…Oye, ¿vamos a tener que bucear en esa enorme montaña de ahí?

En el centro del almacén subterráneo se encontraba una montaña de objetos mágicos de funciones y usos desconocidos.

El arma probablemente estaba entre todas esas cosas, ¿pero cómo diferenciamos cuáles son armas y cuáles no…?

—¡Eh, Kazuma, mira, mira!

Me estaba preguntando qué podíamos hacer cuando Aqua cogió algo muy animada y me lo mostró.

Pero si es…

—¡¿No es una Game Girl [3]?! ¡¿Pero qué está haciendo una consola tan antigua en un lugar como este?!

Esta consola portátil ya era famosa antes de que yo naciera. Aqua la colocó sobre el suelo y comenzó a rebuscar en la montaña de objetos mágicos.

—Si hay una consola tiene que haber cartuchos de videojuegos. Eh, si encuentras el Tetris me lo das, ¿vale? ¡Te lo puedo prestar para que tú también juegues!

—¡¿Acaso he dicho que hemos venido aquí para buscar videojuegos? ¡Lo que quiero son armas! ¡¿Dónde estará esa maldita arma?! …Por cierto, ¿cómo han llegado aquí estas cosas? Todas son de la Tierra…

La montaña de objetos mágicos era en realidad una colección de consolas y juegos que se vendían en la Tierra. Para un aficionado a los videojuegos como yo era muy difícil poder ignorarlos, pero tenía un trabajo que hacer.

Parece como si estas cosas estuvieran pirateadas, como si un amateur hubiera fabricado su propia consola y además con pocos recursos…

En ese momento Aqua encontró algo en un rincón de la sala y me hizo señales con la mano.

—Eh, Kazuma, he encontrado algo.

Cuando llegué hasta ella me enseñó un cuaderno. Me coloqué a su lado y eché un vistazo a lo que contenía. Era esa lengua que según el clan de la Magia Carmesí estaba considerada como antigua.

…Efectivamente, está escrito en japonés.

Aqua leyó lo que estaba escrito sin problemas.

—“Mes O, día X. Oh no, han descubierto el secreto de la instalación, pero afortunadamente no parecen saber lo que estaba haciendo aquí. Si averiguan que estoy utilizando los fondos nacionales de investigación para fabricar videojuegos no sé qué se les ocurrirá para castigarme…”.

Ya veo, ahora todo tiene sentido. Estas instalaciones fueron construidas por un japonés que llegó a este mundo antes que yo. Por eso el código de acceso de la entrada era el código Konami. Seguro que hay más pistas en este cuaderno.

—“Mes O, día X. Un tipo de rango superior ha entrado en mi santuario y me ha preguntado el propósito de estas consolas de videojuegos. No hay forma de que pueda contarle con sinceridad que son para jugar, así que le puse una cara seria y le mentí diciéndole que eran armas capaces de destruir el mundo. Mi colega mujer encendió tímidamente la fuente de energía de la consola y el sonido de inicio la sobresaltó. Siempre se comporta con mucha valentía, no sé por qué le teme tanto a una consola”.

¿…?

Esto me está dando una sensación muy mala.

—“Mes O, día X. Han aumentado el presupuesto para mi investigación y me han pedido que fabrique un arma que pueda luchar contra el ejército del Rey Demonio. Aah, por mucho que se empeñen no deja de ser difícil. ¿No he creado ya todo tipo de cosas con los poderes para hacer trampas que me concedieron antes de llegar a este mundo? Mi contribución a este país ya es absolutamente tremenda. No seré capaz de hacer nada más si siguen presionándome así. Intenté decirles lo más serio que pude que la guerra no sirve para nada, pero mi colega femenina me dio una buena bofetada en la cara y me dijo que si yo tenía este trabajo era solo gracias a que el Rey Demonio existía. Eso es verdad, pero un arma capaz de derrotar al Rey Demonio… ¿Qué debería fabricar?”

Definitivamente inquietante. Siento como si ya hubiese escuchado este tono tan despreocupado en alguna parte…

Aqua prosiguió con la lectura.

—“Mes O, día X. Quiero hacer un robot gigante. Algo que pueda transformarse y combinarse. Cuando les comuniqué mi propuesta pensaron que me estaba riendo de ellos y me dieron un buen sermón, pero yo hablaba en serio. Me enfadé y les dije que solo teníamos que construir un arma de grandes proporciones con una súper resistencia a la magia. Inesperadamente aquella propuesta fue aprobada. ¿Pero qué demonios, de verdad eso es lo mejor? Aunque me pidan que les dibuje un boceto no sé qué podría utilizar como referencia… ¿Oh? Hay un perro callejero justo ahí. Pues entonces serás tú, llamaré a mi nueva arma con forma de perro Asesino de Magos”.

…¿Arma con forma de perro?

—“Mes O, día X. Les entregué los planos del diseño y los alabaron diciéndome: ya veo, una serpiente, ¿eh?, mucho mejor que un artilugio con piernas, una gran idea. Eh, en realidad dibujé un perro. Ya sé que mis habilidades para dibujar son muy pésimas, pero por favor, mírenlo bien, esto es un perro salchicha… ¡Ahora que lo veo más de cerca realmente es una serpiente!”.

—“Mes O, día X. Los experimentos han comenzado. Umm, se mueve. Aunque consigue moverse, esa cosa no tiene baterías de repuesto. Hemos intentado que ataque a los demonios y averiguamos que se queda sin baterías en lo que canta un gallo. Sin embargo esos tipos se asustaron de nuestra invención, por lo que aproveché la ocasión y les dije a mis superiores que esta arma aún era demasiado avanzada para la humanidad de este tiempo. Dejamos el proyecto allí. Ya no puede moverse por la falta de baterías, pero al menos se podría utilizar como fuente de materiales para crear una quimera a modo de arma viviente. De esa forma no necesitará baterías y además eso sería alucinante”.

Ah, ya lo entiendo. El dueño de este cuaderno probablemente fue el tipo que creó a esa cosa.

—“Mes O, día X. He creado la nueva arma para luchar contra el Rey Demonio. Puede que parezca mentira, pero se trata de humanos modificados. Intentamos reclutar voluntarios para someterse a una cirugía de modificación, y reunimos a tantas personas que tuvimos que seleccionar a los voluntarios por sorteo. ¿Acaso entenderán estos tipos lo que realmente significan los humanos modificados? Después de explicarles que esta cirugía era un experimento sencillo para aumentar la predisposición a ser mago hasta el límite, los voluntarios incluso me hicieron peticiones extrañas como que querían tener los ojos rojos o tener un nombre único. ¿Es que en este país son todos idiotas?”

La verdad es que me preocuparía mucho que hubiera más personas como la que escribió estas notas sin sentido.

—“Mes O, día X. La cirugía de modificación ha finalizado. Esa panda incluso me dijo algo estúpido así como: señor, por favor, otórguenos un nuevo nombre. ¿Pero qué dicen de señor, hasta dónde pretenden llegar con esto? Empezaron a ser un problema, así que escogí nombres al azar. Parecían estar felices, ¿tendrán atrofiado el sentido del buen gusto? Sin embargo estos tipos son fuertes, súper fuertes. Los del alto mando me llenaron de elogios, y quisieron darme un encargo importante. A partir de mañana seré el director del laboratorio de investigación y desarrollo. Para ser sincero yo no quiero tener ese cargo, preferiría tener más beneficios. Aah, es una oportunidad de las que solo ocurren una vez en la vida. Les daré a esos tipos un nombre para su clan. Como sus ojos son rojos los llamé la Raza de la Magia Carmesí, pero mi colega femenina se quejó de que el nombre no estaba muy pensado y miró hacia arriba con desagrado. Maldita sea, esa zorra”.

—¡Hey!

No pude evitar alzar la voz. Aqua dejó de leer y se giró para mirarme.

—Ah, perdona, continúa por favor.

¿El clan de la Magia Carmesí son humanos modificados? Mencionar algo tan fuerte así de repente…

—“Mes O, día X. El grupo de la Magia Carmesí siguió incordiándome para que creara un némesis contra el que pudieran luchar, alguna especie de arma asesina de magos. Aah, ¿no les había dicho ya que esa cosa no puede moverse? Además, no estaba hecha para que sirviera de enemigo, y las baterías están agotadas… da igual cuantas veces se los explique, simplemente se niegan a escuchar. Ya son muy viejos, pero todavía siguen en la etapa rebelde. Ya no pude seguir aguantándolos más, así que les hice algo rápido y sencillo… Se supone que mi intención era hacerlo rápido y corriendo, pero de algún modo conseguí crear algo poderoso. Esta cosa seguramente sea el arma que puede destruir de verdad el mundo. Su aspecto es parecido al de un cañón de raíles, aunque el principio de funcionamiento no tiene nada que ver con la aceleración electromagnética. No se me ocurrió un buen nombre, así que dejándome llevar por la comodidad lo llamé Cañón de Raíles (falso)”.

…No fue algo tan impactante después de todo.

—“Mes O, día X. El Cañón de Raíles (falso) es increíble, demasiado increíble. Tanto que hasta me asusté. No estaba pensado para ser un arma de luz capaz de comprimir el maná y dispararlo en forma de proyectil, pero después de que esa panda la probara, su poder me sorprendió. Qué demonios, esto da miedo. Puede que así sea, pero no durará mucho. Lo fabriqué con piezas que saqué de varios sitios distintos, por lo que se romperá después de unos cuantos disparos. Sería terrible si alguien la utiliza con fines malvados, así que la dejaré guardada aquí… Por cierto, esta cosa es bastante grande, tiene la longitud exacta para servir de poste de tender… Oh no, esto es malo, las máximas autoridades parecen encontrarse entusiasmadas con el éxito del proyecto de la Magia Carmesí y quieren invertir una gran cantidad de dinero en crear un arma móvil de tamaño gigante. ¡¿Acaso piensan que construir una cosa como esa es tan sencillo?! ¿Es que se les ha metido agua en el cerebro? No importa, de todos modos no es mi problema.

…Estoy casi seguro… de que el dueño de este cuaderno es…

—Las notas acaban aquí… Oye, creo que ya había visto antes esta letra.

Era del científico que construyó la Fortaleza Destructora Móvil y se convirtió en una pila de huesos a bordo de ella.

Según lo que dice en el cuaderno, estoy seguro de que su siguiente trabajo fue construir la fortaleza móvil.

—Por cierto, ¿no leíste también un cuaderno parecido en la fortaleza? ¿La letra era la misma que la de este?

Aqua juntó las manos como si se hubiera dado cuenta de algo.

Esta chica, ¿es que posee una habilidad inútil como la escritura forense? …No, espera un minuto.

—Eh, ese cuaderno de la fortaleza móvil, ¿no estaba escrito también en japonés?

—Así es.

—¡Maldita sea! ¡¿Por qué no me has dicho antes algo tan importante?!

—¡Pero, si no me has preguntado!

Las palabras de Aqua me produjeron un dolor de cabeza.

—¡Mierda, eso fue lo que pasó! ¡El hombre que causó toda esta serie de desórdenes fue otro de los tramposos que enviaste a este mundo! ¡La Fortaleza Móvil, el Asesino de Magos, todo eso es el trabajo de este loco, aaaah! ¡Escucha! ¡No seas irresponsable y deja de mandar gente a este mundo! …¡Ah, espera!

Grité y me detuve de repente. Aqua inclinó la cabeza con interés.

—…Eh, no me había fijado en esta cuestión, pero… ¿cuántos años tienes? ¿Ya eras una diosa antes de que se construyera la fortaleza móvil?

Pomf

El cuaderno que sostenía Aqua cayó al suelo.

—…Eh, Kazuma, ¿cómo puedes preguntarle su edad a una diosa? Vas a recibir un castigo divino, ¿sabes? …Permíteme dejar esto claro, el tiempo pasa muy despacio en la sala donde tú y yo nos conocimos. Lo que significa que mi edad es diferente a la que tendría según la forma que tú entiendes el paso del tiempo. Si ya lo has comprendido no vuelvas a hacer esa pregunta. Si no te aseguro que recibirás un castigo divino, Satou Kazuma-san.

Aqua me habló de forma severa, y mascullé en voz baja.

—Tch, abuela…

—¡¿Qué has dicho?! ¡¿Estás de broma?, ¿quién es una abuela?, ¿no te he dicho que el tiempo pasa muy despacio en ese lugar?, ¿solo por eso tienes que cambiar la forma de dirigirte a mí?, tan solo he vivido un poco más que tú, aaaah!

Delante había una montaña de cosas que a mí, un aficionado de los videojuegos, me creó la necesidad de llevármelas conmigo. Sin embargo ese no era el momento para algo así.

—¡Maldita sea, ¿dónde está el cañón de raíles?! ¡Si ha dicho que es igual de largo que un poste de tender, debería ser capaz de encontrarlo al instante…!

Busqué el Cañón de Raíles (falso) entre la montaña de accesorios del hogar.

—Eh, Kazuma, el paso del tiempo en Japón, en el Cielo y en este mundo es diferente en cada uno de ellos. Por ejemplo, un mes en Japón es tan solo una hora en el Cielo, pero varios meses en este mundo. Y por eso, mi edad… Eh, ¿me estás escuchando?

Aqua había empezado a darme explicaciones.

—¡Eso no es importante! ¡Tenemos que encontrar el cañón, el cañón! ¡Ayúdame a buscar por aquí! Es una cosa igual de larga que un palo de tender…

…¿Tan largo como un palo de tender? ¿Cañón? Espera, ¿no vi algo parecido hace un par de días en algún lugar de la aldea? ¡Eso es, estaba en la sastrería de aquel tipo llamado Chekera…!

—¡Eh, Aqua! ¡Ya lo he entendido, el arma está en…!

Grité y me di la vuelta.

Ding

—Ja, todavía funciona. He intentado utilizar la magia para sustituir las baterías, y resulta que se enciende. ¿Cuántos cartuchos de videojuegos servirán para ésta? Me llevaré todos los que pueda…

Cogí la consola sin mediar palabra y retiré el brazo con fuerza.…

—¡Piérdete, aaaah!

—¡Guaaaaah! ¡Mi Game Girl!

[3] Referencia a Game Boy.