Kono Subarashii Sekai ni Shukufuku wo!

Volumen 5: Explosión Kouma, LET’S GO!

Capítulo 3: ¡Démosle Alivio a esta Penosa Aldea!

Parte 8

Me quedé ahí paralizado por un momento bajo la iluminación tenue de la luz de la luna.

Delante de mí, Megumin estaba durmiendo profundamente.

Ahora mismo, solo estábamos los dos en el cuarto.

Aqua, que estaba bebiendo que había quedado dormida; Hyoizaburo, quien podría interferir, había sido noqueado por la señora.

… Y, nadie podía salir del cuarto, ya que la puerta estaba cerrada con magia desde afuera.

Era un festín puesto delante de mí.

Solo una cama en el cuarto.

Podrá ser primavera, pero el clima seguía estando frio.

Aun si estamos dentro, podríamos resfriarnos si no usamos una manta.

¿Qué tal si el resfriado empeora y se convierte en neumonía?

Escuché que los hechizos de sanación no podían curar las enfermedades en este mundo.

Morir de enfermedad era visto como muerte por causas naturales, y la Resurrección no funcionaría.

Lo que significaba que morir de enfermedad era peor que morir en batalla; un resfriado era algo terrorífico.

Y así, no había problema con que me acurruque en la cama de Megumin…

– …

Lo pensé por un momento.

Si hago algo a Megumin que estaba durmiendo, no sería capaz de negarlo a Darkness y Aqua si me acusan de ser un demonio y un ser maléfico.

Yo soy un caballero, no algo como eso.

Pero la situación de ahora mismo era que tenía la bendición de ambos padres.

Si era así, ganaría el caso aun si Megumin me acusa.

No, no, no, ¿de verdad podría ganar?

De todas formas, ¿cómo funciona el sistema judicial en este mundo?

¡Maldición, debería aprender las leyes de este mundo seriamente!

Si supiera…

No, no es eso.

Pensar en lo que debería hacer si era acusado; la lógica era errónea.

No puede ser, esta situación también está haciendo que entre en pánico.

Cálmate, necesitas calmarte, Satou Kazuma, ¡cálmate y piensa!

No importa como lo vea, las noches en primavera son muy frías.

No podía pensar en este clima frio. Permítanme acurrucarme en la cama para recuperar mi compostura.

Con cuidado de no despertar a Megumin, entré precavidamente a la cama, sintiendo la calidez de Megumin y los respiros pacíficos a mi lado mientras pienso…

…

¡No!

Qué trampa tan audaz, estaba durmiendo al lado de Megumin antes de que me diera cuenta.

Estuve a punto de levantarme cuando lo noté.

¿Qué haría después de salir rápido de la cama?

Si hiciera eso, definitivamente despertaría a Megumin ¿cierto?

Y entonces, sería justo como el desarrollo típico en los mangas y animes.

Es cierto, sería el inicio de mi juicio de cual no tendría esperanza de defender.

Si eso sucede, aun si argumento que los padres me tendieron una trampa y no hice nada, nadie me escucharía.

Qué injusto.

Justo como sentenciar a un hombre inocente acusado de ser un pervertido en un tren.

No cometeré los mismos errores que mis predecesores.

¡Ya que sabía que sería tratado irrazonablemente a pesar de no hacer nada…!

… Guiándome por la lógica en reversa, escogí no hacer de esto un crimen.

La respiración constante de Megumin sopló mi oreja.

Oh no, mis latidos están acelerándose.

Estuve a punto de hacer algo increíble ahora mismo.

Sin embargo, no soy un hombre santo sin lujuria, sino un hombre sexualmente frustrado que se podía encontrar en cualquier lado.

Permitir que un chico sano duerma en el mismo cuarto con una chica linda; algo definitivamente pasaría.

Más importante aún, fueron los padres de Megumin quienes planearon esta situación.

Está bien, puedo ganar.

Con tantas cosas apoyándome, aun si encaro a Sena en el juicio, ¡definitivamente ganaré…!

Cuando estaba decidiéndome a poner mis pensamientos en acción.

Megumin abrió sus ojos, mirándome con sus ojos soñolientos como si quisiera entender la situación.

– Buenos días, ¿dormiste bien?

– Hmm… Buenos días Kazuma… Erm, ¿cuánto tiempo dormí…?

Ya era pasado medianoche.

No se podía decir que era muy de noche, pero han sido unas ocho horas desde que Megumin dijo que dormiría por un rato y se quedó profundamente dormida.

– Ya veo…

Después de eso, reaccionó repentinamente con la situación en la que estaba.

– … Entonces, ¿por qué estoy durmiendo en la misma cama que Kazuma?

Dijo eso mientras miraba fijamente al techo.

Miré al mismo techo y dije:

– … No me hagas decirlo, es vergonzoso.

– ¿¡Qué!?

Megumin saltó cuando escuchó mis palabras.

– Oye, no jales la manta, hace frío. Primero cálmate.

– ¿¡Por qué estás tan calmado!? ¡Lo primero que noto cuando me levanto es que estaba durmiendo con Kazuma en mi cuarto nostálgico! ¡Cómo puedo estar calmada…!

Dijo Megumin mientras salía de la manta y tocaba su propio cuerpo.

Parecía estar revisando si le había hecho algo.

Entonces dio un suspiro de alivio…

– Oye, ¿de verdad piensas que soy una basura que te haría algo mientras estabas durmiendo? He estado preguntándomelo desde hace un tiempo, ¿qué piensan todos que soy yo? Hemos estado viviendo en la misma mansión por todo un año y nada pasó ¿cierto? Darkness también, tratándome como algún tipo de bestia cuando escuchó que estaría durmiendo con Megumin.

Jalé de regreso la manta que fue sacada cuando Megumin salió. Hacía frio, así que solo mostré mi rostro desde la manta.

En respuesta, Megumin respondió incómodamente.

– … Ugh, ti-tiene razón, disculpa… Estoy un poco confundida al ver esto apenas me levanto… E-era obvio, Kazuma podrá acosar sexualmente a otros cuando hace sus bromas, pero no es alguien que lo haría de verdad.

Dijo Megumin mientras sonreía y se relajaba.

Mantuve mi posición de solo sacar mi cabeza de la manta y le dije a Megumin:

– Por supuesto, no me subestimes. Después de todo, tu madre fue quien me empujó a este cuarto. Incluso cerró la puerta con un hechizo, así que no tengo opción más que meterme en esta manta.

Megumin suspiró profundamente cuando escuchó eso.

Parecía estar expresando que finalmente entendió la situación.

– Cielos, ella…

Murmuró con un tonó relajado. Abrí la manta para ella, palmeando el espacio a mi costado.

– Esa es la situación. Hace frío afuera, así que entra. No te preocupes, no haré nada.

La expresión de Megumin se paralizó cuando escuchó eso.

Bajó su cabeza y dijo con un tono deprimido:

– … ¿De verdad no hará nada? ¿Aunque finalmente estamos solos?

Dijo algo que estimuló mi imaginación.

¿Hmm?

¿Qué, qué es esto? ¿Está bien hacer algo?

Sostener mi mano cuando estábamos acampando fuera y la situación actual, ¡entonces sí llegó mi época popular!

Negué fuertemente lo que dije hace un momento.

– No seas tonta, finalmente estamos solos, ¡cómo no podría hacer algo! ¡Hasta he obtenido el permiso de tu madre!

Escuchando eso, por alguna razón Megumin corrió hacia la ventana.

– ¡Sabía que sucedería! ¡Dormiré en la casa de Yunyun esta noche!

– ¿¡Ah!? ¡Mierda, me hiciste trampa!

Megumin saltó por la ventana y despareció en la noche.