Fire Girl

Volumen 1 – Segundo Volumen: Maga de la Tierra Imaginaria

Capítulo 17

Parte 1

Los dos agarraron sus equipos y comenzaron a perseguir a la chica y la manada de lobos.

Mientras caminaban, Homura golpeó el hombro de Touya y se quejó.

“¿¡Por qué no viniste con nosotras!? ¡Te fuiste solo por ti mismo! ¡Justo en medio de esa manada enorme!”

“Sólo pensé que tenía que alejarlos de alguna manera. De lo contrario, podrían habernos llevado a todos a la vez lanzando una de esas bombas explosivas en el sótano”.

“P-pero repeliste una, ¿¡no!?”

“Solo lo hice por la agitación del momento y… Maldita sea.”

Touya apretó los dientes.

“Sí, me he equivocado. Es como tú dices, Hinooka. Debería haber ido directamente al sótano con ambas”.

Sin ralentizar su ritmo de marcha, Touya inclinó la cabeza.

“Lo siento.”

“… No, estoy feliz de que estés ileso después de todo eso.”

“Tú también, Hinooka.”

Dejando escapar una pequeña risa, incluso mientras se hundía en el remordimiento, Touya parecía aún más adulto que de costumbre. Estaba mirando por el camino por el bosque, estando además preocupado por las heridas de Misasagi-senpai.

“Los lobos no vinieron a mí. Era como si estuvieran ganando tiempo manteniéndome allí. Ellos iban por senpai desde el principio”.

“De ninguna manera. ¿Por qué?”

Touya negó con la cabeza.

Examinaron cuidadosamente su entorno y buscaron las huellas dejadas por los lobos.

El camino natural y suavemente curvado a través del valle estaba flanqueado por el río y las montañas a cada lado,  siempre y cuando ellos no trataran de cruzar repentinamente las montañas, el terreno no se abría, excepto hacia el sur. Si trataban de cruzar el río hacia la orilla opuesta, deberían ser capaces de ampliar su rango de visión.

Sin embargo, al final del valle no había más que un tramo de árboles, y los dos no podían encontrar una mejor forma para ir tras ellos.

Afortunadamente, Homura fue capaz de seguir el ritmo de Touya sin perder el aliento.

“Más importante aún, ese chica. ¿Deberíamos llamarla chica lobo por ahora? De todos modos, dijiste que era un chica desaparecida, pero…”

“¿Dudas de mí? No es sólo el sonajero; cuando la miré de cerca, tenía la misma cara que la bebé en esa foto. Es, definitivamente ella”.

“Incluso si ella vino a Nutella hace tres años, ella debe, por lo menos, tener más de dieciocho años de edad ahora. Los números no cuadran”.

“Ugh, eso es… Tal vez hubo un problema con su crecimiento físico o algo…”

“Pero, sin duda, es más creíble que ella sea una Nutelliana. Después de todo, podía entender nuestras palabras. Incluso utilizaba el japonés”.

Homura se dio cuenta de que por primera vez ahora que Touya se lo señaló.

“¡Sí! ¡Ella lo usaba! Pero parecía que ella estaba usando un dialecto muy antiguo. Su ropa también-nunca he visto ropa como esa”.

“……”

Cuando Touya estaba pensando en silencio sobre la cantidad de posibilidades, Homura preguntó con nerviosismo.

“Si no recuperamos a senpai, vamos a estar atrapados aquí en la Nutella y moriremos en el intento?”

“No…”

Touya regañadientes negó con la cabeza.

“Sólo podemos ir al campamento base de la Academia Hiyoshizaka. Está bastante lejos, pero sé su ubicación. Si no volvemos a tiempo, Mori-chan enviará una solicitud de rescate y la ayuda vendrá. Tendríamos que esperar varios días hasta que los miembros del club de la Academia Hiyoshizaka terminen de prepararse y vengan aquí, pero no vamos a morir. Tenemos muchos suministros de alimentos”.

“Ah, ya veo. Hay esa opción también”.

La expresión de Homura se iluminó por un instante, pero luego se ensombreció de inmediato otra vez.

“Pero entonces, senpai va a-”

“Podríamos acabar dejándola atrás. Pero ella tiene el anillo de transporte”.

“…Sí. Si ella acabara de recuperar la conciencia, debería ser capaz de volver inmediatamente a la Tierra”.

Homura asintió con esperanza.

***

Pasaron a través del bosque y llegaron a un río. El flujo era lento y suave aquí, con varias piedras en medio del río para actuar como puntos de apoyo, Homura y Touya ya habían experimentado como cruzar ríos durante su última misión.

Después de buscar diligentemente tierra blanda a lo largo de la orilla del río, Touya encontró allí lo que estaba buscando.

“Huellas. ¡Se dirigen al norte! ”

Todavía había pistas húmedas que quedaban en las rocas que sobresalían de la superficie del río también.

Después de recoger su equipaje, Touya miró a la otra orilla del río.

“¡Espera, Touya-kun!”

Al momento en que Touya entró en las aguas poco profundas del río, Homura lo llamó para detenerlo.

“Mira estos…”

Ella tendió las manos, y agarró lo que era la mini-bolsa con múltiples herramientas y un cuchillo plegable que senpai había estado llevando.

“Todo fue dejado en el suelo por allí. Y…”

Con voz temblorosa, ella tendió un anillo de plata entre sus dedos.

“¡Este es el anillo de transporte…!”

“¡……!”

Sin duda era el anillo de transporte que Misasagi-senpai llevaba en su dedo.

Ellos no sabían por qué lo habían dejado caer aquí.

A pesar de que era su herramienta más importante y medio indispensable de escape, eso era lo que Touya menos quería ver en este momento. Su expresión angustiosa transmitía claramente eso.

Después de un pesado silencio, Touya finalmente habló, exprimiendo las palabras entre sus dientes apretados.

“Vamos a volver.”

“¿…De vuelta a dónde?”

“A nuestro campo base, obviamente. Podemos llegar rápido si corremos”.

“Eh… ¿Qué hay de senpai?”

“démonos prisa. O será demasiado tarde”.

Touya se puso sobre sus talones y comenzó a recordar su camino, mientras que Homura estaba sin habla mientras lo observaba.

“¿Por qué? ¿Por qué vamos a volver?”

“No nos podemos permitir que el transporte falle en esta situación, independientemente de lo bajo que sea el chance. Tenemos que volver al sótano”.

“¡Estoy preguntando que vamos a hacer con respecto a senpai!”

“¡No hay nada que podamos hacer por ella por nosotros mismos! ¡Tenemos que ir a buscar la ayuda de Koma-senpai y los demás!”

En un deslumbramiento, Homura se dio la vuelta y miró las huellas tenues que estaban siendo arrastrados poco a poco por el río a sus pies y las huellas de los lobos que lentamente se secaban en la parte superior de las rocas.

“… Pero no sabemos dónde llevaron a senpai. No podemos dejarla sola en este planeta enorme por ella misma”.

“La única cosa que podemos hacer es creer en senpai.”

“…No. No puedo hacer eso. Senpai está herida. ¡Tenemos que ir a rescatarla…! ”

Touya contuvo una respiración agitada y habló con Homura para advertirle.

“Por favor, comprende, Hinooka. Tú misma lo señalaste hace un momento, ¿recuerdas? Novatos inexpertos como nosotros que no saben nada acerca de Nutella o técnicas de supervivencia tratando de ir imprudentemente, simplemente aumentarán el número de víctimas”.

En su cabeza, Homura entendía que era correcto lo que Touya dijo. Aun así, Homura no era de las que fuera a dar marcha atrás.

“¡…Deja de actuar como senpai!”

Homura golpeó el pecho de Touya y desató su ira.

“¿Te sientes responsable sólo porque me invitaste al club de exploración? ¿Crees que eres mi tutor? ¡Somos de la misma edad! ¡Solo entraste al club un mes antes que yo!”

“¿Ah? ¿Qué dijiste?”

Touya le devolvió la mirada, pero a pesar de que fuera intimidada, lo ignoró y dejó que sus sentimientos estallaran.

Homura siempre había estado confiando en el serio y diligente Touya y nunca había entrado en discusión con él, pero algo en su corazón gritaba que no podía ceder e ir hacia atrás de esa forma.

“Touya-kun… ¿no te preocupa Senpai? Si nos vamos ahora, ¿cuándo crees que vamos a volver?”

“Eso es… tendremos que llamar a una citación de emergencia a los miembros del club y hacer los preparativos para una búsqueda… El tiempo más corto sería de ocho horas. En la Tierra, es decir”.

“¡Cuarenta y ocho horas pasarán Nutella durante ese tiempo! ¿Qué pasa si llueve? ¿Qué pasa si la pista es cubierta por otros animales? ¡Ya no seremos capaces de encontrar incluso las pocas pistas restantes a donde llevaron a senpai! ¡Y, sobre todo, no hay ninguna prueba de que senpai está segura…!”

Sin prestar atención a las lágrimas que corrían por sus mejillas, Homura le declaró a Touya mientras apretaba los puños, cerrados en señal de frustración, contra su pecho.

“Puede que no seamos capaces de volver a Nutella, ¿verdad? ¡Si nos vamos, utilizaremos toda la energía mágica cargada en este anillo de transporte! Vamos a tener que dejar el resto a Koma-senpai y el resto después. ¿¡Estás de acuerdo con eso!?”

“… No se puede evitar.”

Esto era difícil para Touya también. Homura entendía eso. Pero aun así.

Secándose las lágrimas, Homura le preguntó una pregunta más.

“Touya-kun, si estuvieras solo en esta situación, ¿qué harías?”

“…”

“Respóndeme honestamente-”

Touya volvió a mirar a Homura con una expresión mortificada.

Con el tiempo, suspiró y habló.

“Me gustaría ir tras senpai. No importa lo que me dijera alguien después”.

Homura sonrió y asintió con la cabeza. Sus sentimientos eran los mismos.

“Vámonos. Tan lejos como podamos”.

Después de decir eso, Homura recogió su equipaje.

Touya sacó el mapa y se rascó el pelo.

“Si no podemos seguir sus pistas en cualquier momento, haremos un retiro de emergencia en ese mismo momento, ¿de acuerdo?”

“Sí. Por supuesto.”

Eran muy conscientes de que esta era una apuesta imprudente.

En primer lugar, los dos clasificaron su equipaje y mantuvieron sólo el mínimo de equipo necesario.

No tenían idea de cuántos puntos ásperos encontrarían en su persecución. Ya que no tenían experiencia con el ambiente natural de Nutella, le dieron prioridad a las herramientas de ayudar en la escalada o al pasar por zonas pantanosas en el fin de evitar tanto peligro como sea posible.

Sus suministros de alimentos consistían en doce comidas con buen valor divididas entre ellos dos. Originalmente sería una sola ración para una persona para esta misión. Por lo que conocían de los lobos, esta cantidad era en absoluto suficiente para compensar la gama de acciones de los lobos. Incluso si los alimentos en conserva fueran compactos y portátiles, todavía ocupaban la mayor parte de su espacio de equipaje.

Se acordó de manera implícita entre ellos que este sería su abastecimiento de alimentos para un viaje de ida. Si perdían en gran medida de vista su objetivo durante la persecución, sería difícil permanecer aquí más lejos en cuanto al tiempo.

Las aves también parecían ruidosas en la dirección a través del bosque que la manada de lobos había atravesado.

“¿No sería más fácil las cosas si tuviéramos transmisores o un radar?”

“Pero no los tenemos. Y no hablemos más de aquí en adelante”.

“……”

Homura respondió cerrando la boca con un “Hmph” y cerró sus oídos con un gesto exagerado.

Los dos centraron sus sentidos a medida que comenzaban a avanzar en el bosque a un ritmo de avance lento.

Muchas huellas claras de los grandes lobos quedaron atrás, más de lo que había esperado.

No sólo habían huellas talladas en el suelo blando del bosque, también habían ramas rotas y trozos distintos de pelaje gris visible. Incluso a veces excremento.

A pesar de que perdieron de vista las pistas cuando se separaban en varios puntos, siempre lograron encontrar nuevos indicios cada vez, pareciendo que mejoraban sus instintos vagos para localizar las rutas que los lobos tomaron en el intento.

En particular, Touya demostró un extraordinario sentido del olfato y siguieron sin necesidad de caminos, uno tras otro, impresionando a Homura.

Dentro de un alto matorral que hacía imposible ver adelante con la vista humana, pasaron por un camino natural que actuaba como un túnel y cruzaron un desfiladero entre acantilados que harían dudar a cualquier ser humano, y finalmente encontraron un nuevo trozo de pelo de lobo de nuevo en el otro lado.

“, Touya-kun, eres increíble. Siempre encuentras pistas cada vez. ¿Conoces el aroma de Senpai? ¿Eres un perro de la policía? ¿Un chico Doberman?”

“Ahora…”

Mientras que ponía su cantimplora en la boca, Touya se limpió el sudor.

“Es probable que no piensen que los estamos persiguiendo.”

“En ese caso, tenemos una oportunidad.”

“Me pregunto eso.”

En otras palabras, tenían mucha confianza en su velocidad al caminar.

Touya miraba el camino por delante con ansiedad.

“Están yendo más y más lejos…”