Uchi no Musume no Tame naraba, Ore wa Moshikashitara Maou mo Taoseru kamo Shirenai

Volumen 1

Capítulo 6: La Pequeña Niña y el “Incidente”

Parte 2

Fueron tres días después del incidente que Dale se dirigió al templo de Asfar.

Al contrario de sus usuales chaqueta de cuero y túnica, llevaba una túnica oscura de alta clase, a la cual era otra clase de “armadura de batalla” para él. El sigilo* colgando de su cuello tampoco era parte de sus prendas usuales. (N.T.: El “Sigilo” en este caso es un tipo de sello o amuleto mágico)

El complejo, elaborado diseño del sigilo mostraba se estatus en el santuario. No era solo para mostrar que él había sido bendecido con protección divina. Después de todo, había estrictas regulaciones en cuanto a qué clase de materiales puedes usar para hacer tal sigilo, y esas regulaciones estaban basadas en tu posición en el templo. Solo con verlo a él, era obvio que Dale sostenía una alta posición ahí. La anciana sacerdotisa que manejaba el templo de Asfar en Kreuz también estaba consciente de esto.

Dale era un aventurero con profundos lazos con el duque, funcionando como su primer ministro. Sin embargo, los templos eran reconocidos como organizaciones extraterritoriales, enteramente apartadas de la autoridad de la nación. Aunque los templos estuvieran dentro de la nación de Laband, no tenían la necesidad de escuchar órdenes de la familia real o del duque.

Era difícil decir que tan verdadero era eso en la práctica, pero esa era, al menos, la definición oficial.

Dale sabía todo esto muy bien, por lo que es por eso precisamente que él visitaba el templo de Asfar no como un aventurero sirviendo a la familia ducal, sino como alguien que sostenía el rango de sumo sacerdote.

Normalmente, él no era muy aficionado de dejar que la gente supiera que él tenía la protección divina. Después de todo, no es como si él decidiera nacer así.

La protección divina que Dale poseía era un milagroso poder que los dioses concedían a los frágiles mortales. Y así, ningún templo podía tratar a alguien que poseía algo así de pobre manera, incluso si la protección divina venia de otro dios que al que servían. Los dioses, todos, mantenían una posición equitativa.

Más aún, la protección divina de Dale sucedía que era especialmente fuerte. No es como si la fuerza de la protección divina estuviera directamente ligada al estatus, pero para aquellos que servían a los dioses, la gente del templo no podía sino quedar impresionados por los individuos que poseían un poder que servía como prueba de su labor con los dioses mismos. Adicionalmente, no había tal cosa como un sacerdote que no pudiera reconocer la fuerza de la protección divina de alguien, y aparte de aquellos con un rango tan bajo que solo eran contratados para hacerse cargo de labores simples y otras tareas, todos quienes servían al templo poseían una pequeña porción de esta.

Los templos originalmente comenzaron como instituciones construidas para ofrecer un santuario que garantizaría la protección a aquellos que poseían el inusual poder conocido como protección divina. Siendo así, solo aquellos que poseían el poder divino tenían permitido optar por la opción de ser sacerdotes.

「No creo que haya necesidad de repetir la razón por la que vengo. Creo tener el derecho de participar en lo que ha pasado」

「Sí, ciertamente」

Siendo la sacerdotisa mayor del templo, ya había escuchado el reporte. La niña demonio que había sido adoptada por el joven muchacho antes de que esta comenzara a atender a la escuela manejada por el templo este otoño. La sacerdotisa había escuchado también de lo que la profesora había despreciablemente hecho a la niña.

「Normalmente, no importa que principios o posición alguien tenga, yo no trato de pelear con ellos por eso. Y no es como si los ‘supremacistas humanos’ sean tan raros. Pero sigo pensando que al menos cuando se trata de los ciudadanos de Kreuz, eso se puede considerar con un punto de vista muy angosto y centrista」

「…Es justo como dice」

「En un pueblo como este, construido en la espalda de los viajeros y los intercambios, no importa la ocupación, estas sometido a interactuar con otras razas. Es difícil imaginar que alguien sirviendo al dios de la educación fallaría en saber algo tan obvio」

En la superficie, Dale no mostraba ni un rastro de furia. Pero este era un hombre que podía hacerte sentir un infinito sentimiento de terror, incluso cuando su rostro está completamente calmo. Aun si se estaban viendo por primera vez, la sacerdotisa sintió un frío sudor bajando por su espalda. Incluso como una sacerdotisa de alto rango, no era muy seguido que ella se encontrara con alguien con la capacidad de asesinar monstruos y bestias gigantes.

「Escuché que le llamó la atención en frente de los niños y se burló de ella por ser parte de otra raza mientras expresaba abusivamente sus opiniones sin base alguna. ¿Es esa a opinión de Asfar hoy en día?」

「Ella nació cerca de una tierra de demonios, y… perdió a su familia en una disputa con ellos, así que…」

「¿Así que está bien burlarse de una niña inocente y tratarla como un monstruo? ¿Es esa la excusa del templo? Qué noble」

「No, por supuesto que no…」

Mientras se limpiaba el sudor de la frente, la sacerdotisa busco algo que decir. Con lo que él dijo, era claro que el hombre ante sus ojos sabia de todo lo que había pasado.

Dalo no pasó estos tres días antes de venir aquí sin hacer nada. Por supuesto él estaba preocupado por la condición de Latina y no quería separarse de ella. Pero al mismo tiempo, también sintió la necesidad de saber qué le había pasado a ella.

Él no solo se detuvo para preguntar a los amigos de Latina. También pidió ayuda a Rita, que era una experta en recolectar información, e incluso visito a personas como la madre de Chloe para escuchar de los rumores del pueblo. Al comparar y reducir la información que recolectó, finalmente consiguió la evidencia que necesitaba. De allí, él dedujo la cadena de eventos. Dale daba la impresión de ser muy emocional cuando se trataba de Latina, pero era precisamente porque él estaba tan furioso que fue capaz de concentrarse. Si no podía hacer eso, entonces no se tendría merecido llamarse “de primera clase”.

Aparentemente, así es como fue el incidente:

Parece que la sacerdotisa que se había convertido en la nueva profesora de Latina había sido transferida a la ciudad desde un país vecino.

Los niños la describieron como alguien que siempre hablaba en una voz estridente. Quizás esa no fue su intención, pero los niños eran sensibles a ese tipo de cosas, y no trataban de endulzar sus palabras.

Aparentemente, Latina mantuvo su distancia de la sacerdotisa desde el primer instante. Ella tenía una buena imagen de la profesora anterior, y nunca había actuado de la manera en que lo hizo frente a la nueva sacerdotisa. Sus amigos fueron cautelosos también, parece ser.

Y entonces, ese día vino.

La sacerdotisa se dio cuenta que Latina tenía cuernos.

「Un demonio…」 ella murmuró en sus adentros, y agarró el cabello de Latina. Mientras que el suave cuerno detrás del listón era expuesto, la sacerdotisa escupido con odio, 「¡¿Qué está haciendo esta cosa tan detestable en un pueblo para personas?!」 como si fuera una pregunta obvia.

Mientras Latina estaba shock y sin palabras en su boca, las venenosas palabras seguían fluyendo. 「No hay forma de que estas bestias que viven por cientos de años sin cambiar de apariencia puedan siquiera ser llamadas ‘personas’, ¿verdad?」

La sacerdotisa proclamaba en voz alta todo esto a los desconcertados niños, viéndose absolutamente segura de lo que decía.

Con el cabello de Latina aun en su agarre y la joven chica incapaz de moverse, la sacerdotisa empuja a Latina hacia al frente, como mostrando la presa que acababa de atrapar.

「Estos subhumanos que no son parte de la humanidad no son ‘personas’. Estos grotescos monstruos hacen burla hacia como la gente debería vivir. ¡No se dejen engañar!」

La población humana era mucha más grande que la de cualquier otra raza. Como resultado, había muchos aquellos que mantenían pensamientos increíblemente ignorantes que excedían esos de los que llaman “razas insulares.” En ese aspecto, la sacerdotisa “solo” estaba expresando sus propios principios.

Pero en este pueblo, eso es herejía.

Sin siquiera darse cuenta del desagrado que los niños sentían, ella continúo con su charla.

「Y los demonios en particular, ¡son cobardes y malvadas bestias, con lazos con los mismo reyes demonios! Nunca deben bajar su guardia. ¡La forma en que ella se metió en este pueblo debería ser la prueba suficiente de eso!」

「¡Aah!」 gritó Latina, su cara palidecía mientras la mujer agarraba su cabello con más fuerza. Eso sirvió como señal para que sus amigos entraran en acción.

Chloe tiro su litografía (Una piedra negra en la que los estudiantes tomaban notas) lo más fuerte que pudo. No golpeó a la sacerdotisa pero sí chocó contra la pared con un fuerte ruido.

「¡¿Qué estás haciendo?! ¡Eso fue peligroso!」

Distraída por la acción de Chloe, el agarre de la sacerdotisa se afloja, y Latina cae al suelo.

Luego de intercambiar miradas, Anthony y Marcel se mueven para salvar a su amiga.

En ese momento, Rudy patea su escritorio. Estaba hecho para tres niños, así que solo se movió un poco con su fuerza solo, pero fue más que suficiente que atraer la atención de la mujer.

「¡Detente! ¡¿Qué crees que estás haciendo?!」

Mientras ella gritaba, la mirada de desagrado de los niños en el salón de clases de convirtió en una de miedo.

Ellos veían a esa mujer gritando en su estridente voz mientras sus buenos amigos se acobardaban, viendo como si ella estuviera a punto de romper a llorar. Para los niños, era mucho más que claro quién era el monstruo aquí.

Cuando Rudy pateó el escritorio de nuevo, Chloe pateó el otro extremo al mismo tiempo. Esta vez el sonido era masivo, y colapsó en el suelo.

「¡Deténganse! ¡Deténganse!」

Habiendo agarrado el ritmo, el par comenzó a patear un extremo del escritorio cada uno, causando que el tono trillado de la mujer se elevara aún más. Varios niños empezaron a llorar.

La mujer gritó, irritada aún más por los lloriqueos. 「¡Deténganse! ¡¡Alto!! ¡¡Bastaaaa!!」

Atraídos por la anormal cacofonía, otros sacerdotes llegaron corriendo para ver qué estaba pasando. Lo que encontraron fueron varios niños llorando, asustados en el salón de clases que parecía haber sido golpeado por una tormenta. Y gritando al centro de todo, estaba su ‘colega,’ con una cara como de ogro, y un grupo de niños mirándola, parados en pos de proteger a una niña que estaba tan blanca como la nieve.

Los otros sacerdotes entraron al salón de clases y sacaron a la fuerza a la tan llamada profesora, quien seguía con su horrible plática.

「Profesora…」 llamó la palideciente Latina a uno de los sacerdotes, quien había sido su profesor hasta hace poco, mientras se llevaban  a la mujer lejos.

「¿Qué es diferente? Es Latina… Los demonios ¿tan diferentes de los demás?」

「Latina, eso es…」

「¿Cómo Latina vive diferente? ¿A qué se refería con que ella vivirá por cien años? ¿…Latina no es igual a todos?」

Incapaz de mentir a las palabras de la doliente pequeña, el sacerdote frunce tristemente. Arrodillándose, él ve a Latina a los ojos.

「…La diferencia más grande entre humanos y demonios no puede ser engañada. Los demonios son especialmente longevos, y viven mucho más que los humanos」

Los grises ojos de Latina se abren de par en par. Ella era lo suficientemente inteligente como para saber lo que eso significaba.

Ella se fue a casa, incapaz de esconder su sorpresa. Incluso las preocupadas voces de sus amigos parecían no alcanzarla.

Y así, ella rompió su cuerno con su propia magia.

Latina ya había recibido el tratamiento necesario para el momento en que Dale llego a casa y escucho del incidente.

Niili era el dios que gobernaba sobre la vida y la muerte, así que los templos de Niili servían como organizaciones para la investigación de cosas como patología, tecnología medicinal, y farmacéuticos. Los ancianos del pueblo usualmente usaban los templos como clínicas, donde los resultados de las investigaciones eran aplicados.

Kenneth llevó a Latina a una tal clínica.

Afortunadamente, su condición no era tan grave, en parte debido a que ella fue encontrada rápidamente, así como los primeros auxilios que recibió de manera excelente.

Incluso aunque los demonios eran una raza robusta, Latina seguía siendo joven, así que si su pequeño cuerpo perdía mucha sangre, ella no hubiera sido capaz de recuperarse.

Cuando Dale llegó corriendo a la clínica, encontró a Latina reposando en una cama, su cara pálida por la pérdida de sangre. Ella había recuperado la conciencia, pero sus ojos parecían aun vacantes, vacíos para cuando ella apenas notó que alguien había llegado. Esos grises ojos tambalearon cuando ella vio que él estaba ahí, respirando fuertemente.

「Dale…」 ella llamó en una seca y suave voz.

Sintiéndose aliviado al escuchar a Latina llamarlo por su nombre, él se sentó al borde de la cama y se inclinó.

「Latina… ¿Por qué…?」 él le susurró en una voz temblorosa mientras se acercaba a ella y tocaba su mejilla.

Con eso, ella rompió a llorar.

「U-uh… uwah…」 balbuceaba Latina de manera incomprensible. Lagrimas corrían por su rostro.

「Latina… ¿te duele?」 pregunta Dale ansioso, pero sin recibir una respuesta. Ella solo siguió llorando y tomando la mano de Dale fuertemente.

Ella meneó su cabeza adelante y atrás.

「Latina no lo necesita… ella no lo necesita…」 Dale escuchó entre el llanto y lloriqueo.

「¿Latina?」

「Latina no necesita la prueba de que es una demonio… ¡Ella desea que nunca hubiera tenido cuernos!」

Aun sin saber qué le había pasado, Dale estaba perdido. Pero viéndola en ese estado, él sabía que no debería reprimirla sin cuidado.

「Latina…. Latina. ¿Qué pasa? ¿Qué sucedió?」

「Latina lo odia. Por qué… ¿por qué Latina es un demonio? Ella no vive donde los demonios… y ellos dicen que no la quieren. Todos a quienes les importa Latina, quienes dicen que ella puede quedarse con ellos, son humanos…」

Esta era la primera que él la veía tan triste.

「¿Por qué es Latina la única que debe vivir más tiempo? Latina no quiere quedarse sóla… luego de que todos mueran…」 Latina sacó todo lo que sentía, todos sus sentimientos y preocupaciones que ella había estado ocultando a Dale hasta ahora, su voz llena de dolor, y sus palabras resonaban en todo el cuarto.

Con ese llanto, Dale se dio cuenta de lo que a Latina en verdad le preocupaba. Ella se había dado cuenta de que los demonios y humanos nacían con una diferente cantidad de tiempo, o longevidad.

「Latina lo odia… Ella lo odia… ¿Por qué, por qué…? Latina desearía no ser un demonio… Ella quiere ser igual a todos… Ella no se quiere quedar sola nunca… la única que quede, nunca más… Latina quiere quedarse con Dale y sus amigos para siempre… Ella no quiere estar sola de nuevo, cuando todos se vayan…」

Lo que había lastimado a Latina más que nada y la había llevado a la desesperación no era la malicia de alguien. Era la verdad… la verdad de una diferencia inmutable entre ambas razas.

La verdad de que Dale no le había contado a Latina antes. Lo que la mayoría de razas insulares tenían en común es que eran mucho más longevas. Diferentes tiempos de vida conllevan un punto clave a lo que uno siente valioso. Por ejemplo, diez años se sienten diferentes tanto para humanos como para demonios. Y con ese sentimiento de diferencia absoluta, era difícil conocerse el uno al otro a mitad del camino.

「Latina, lo siento…」

Quizá no tiene sentido disculparse ahora, pero en ese instante, esas fueron las únicas palabras que salieron de su boca.

Dale tomó a la sollozante Latina, y la abrazó. Su suave cabello descansaba en su mejilla, y él suavemente pasa su mano sobre su herida, la cual aún tenía tenues rastros de sangre alrededor.

「Debió haber dolido mucho… En verdad lo siento, Latina…」

Mientras ella seguía llorando con todo lo que tenía, incluso le parecía difícil respirar, Dale acarició de manera incómoda, pero firme, su espalda, tratando de llevarse un poco del dolor de la chica.