Ultimate Antihero

Volumen 3 – La Gran Subyugación de Oriente

Capítulo 2

Parte 8

— ¡Esa voz de ahora…!

La secuencia de voz que resonaba en la mente también le llegó a Sumika quien estaba dentro de la vieja librería del “El Caos Reptante”.

Junto a Sumika quien estaba confundida por el suceso repentino, “El Caos Reptante” se puso la mano en la barbilla y dijo un breve comentario con un gemido.

— Hmmm. Parece que ya está comenzando.

— ¿Comenzando?

— La conquista de este mundo por los ángeles. Los que quieren hacer este mundo suyo no son solo los demonios. El motivo es diferente, pero los ángeles también están observando atentamente para tomar este mundo todo el tiempo

— ¿Qué razón hay para que los ángeles apunten al mundo humano?

— Al igual que el alma humana es una provisión para los demonios, los ángeles lo están haciendo de manera similar con la fe como su provisión. En otras palabras, para uno y otro lado, el mundo humano es un recurso importante. Los humanos también luchan por campos de petróleo, incluso van a la guerra por distintas cosas ¿no es así? Esto es similar con eso. Sin embargo…

Después de decir eso, “El Caos Reptante”, se detuvo y murmuró con una cara meditativa.

—… Debido a la manifestación de Typhon, el mundo humano actual está “Apoyándose en el mundo demoniaco”. Los ángeles deberían haberse vuelto incapaces de llegar al mundo humano directamente con su cuerpo de carne como en el pasado, pero… ¿Me pregunto si esta vez es un recipiente preparado por el lado del mundo humano…? Si ese es el caso, entonces realmente no están cuidando de su aspecto en absoluto. ¿Su método no es igual al de los demonios con esto? Esos tipos son realmente una obra maestra.

“El Caos Reptante” hizo una amplia sonrisa desagradable.

Sumika no entendía el significado de la mayoría de sus palabras, pero incluso de mala gana era capaz de entender que en la actualidad la esfera de vida de Tokio estaba en una situación peligrosa.

«Los “Cinco Grandes Líderes” y los cielos se dieron la mano y atacaron a Japón, ¿eso es lo que quiere decir?»

Normalmente estaba la imagen de que el Ángel era el aliado de los humanos, así que no deberían estar asociados con una palabra peligrosa como conquista.

Pero, una vez… Sumika había luchado con el ser llamado ángel.

El poder que conspiró con la “Iglesia del Camino Sagrado”.

Ni siquiera sería extraño que actuaran violentamente como para conquistar el mundo humano.

Si eso era así, entonces ella tenía que ir rápidamente afuera…

«… Sus palabras de que Homura-san había matado a sus camaradas son preocupantes y estoy reacia a dejar a este mal así, pero…»

Así como él mismo dijo, él no era el tipo de <dios maligno> que esparcía destrucción sin sentido.

Ella supuso que podía dejarlo solo por ahora.

En primer lugar, él tampoco era un oponente que Sumika podría hacer frente por sí sola.

El asunto acerca de Homura también era algo por lo que no podía hacer nada en este momento.

Lo que debía hacer ahora era… salir aunque fuera por un segundo más rápido y ocuparse de esta situación.

Decidiendo eso, Sumika iba a salir a la calle.

Pero…

— Ah, espera, espera.

“El Caos Reptante” la agarró de la mano y tiró de ella.

Ella nunca había imaginado que iba a detenerla, así que Sumika se estremeció por tener su mano tocada y gritó con una voz que era casi como un chillido.

—… ¡Libérame!

— Te dije que te calmaras. No es como si te fuera a comer. Después de todo, enviar al invitado largamente esperado de vuelta a casa sin darle ningún regalo va en contra de mis principios. Te voy a dar algo bueno.

— ¡No necesito el poder de alguien como tú!

— Si se trata de proteger aún más gente, entonces no importa el poder maligno disponible, debe ser usado. ¿No es una parte en la que puedes simpatizar con Homura- kun?

— ¡…!

—… Bueno, incluso si digo eso, no existe un grimorio o “Artefacto” que pueda conceder ese deseo tuyo de “querer estar de pie como una igual de Homura-kun” no existe aquí. No sé si incluso “Liber Legis” puede conceder un deseo así, ese deseo es demasiado grande… Por eso, bueno, te voy a dar algo útil para la tú actual.

Después de decir eso, “El Caos Reptante” colocó un cierto objeto del tamaño de la palma humana en la palma de Sumika y le hizo agarrarlo.

—… Esto es…

— Algo que hice llamado “Saturday Baron”. Es muy lindo ¿no te parece?

Sumika quien era una experta en la hechicería sabía qué clase de poder tenía esta cosa.

Era molesto, pero sin duda… esto era algo extremadamente útil para la situación actual.

Esa fue la razón por la que Sumika lo metió en su bolsillo y devolvió un gracias por obligación.

—… Muchas gracias.

— Aha. No hay de qué. Después de todo un mundo de distopía controlado por los ángeles, donde sólo hay personas justas que se les permita hacer lo que es justo, eso es algo inútil incluso para mí. Es precisamente debido a que los humanos tienen ambos, bueno y mal, que son interesantes. Me encanta el caos que poseen los humanos. Por eso, voy a esperar una buena pelea de todos ustedes.

—…

Un destello de curiosidad que no podía ser escondido apareció en los ojos del “El Caos Reptante”.

Su charla indirecta que era completamente como un espectador con ganas de proyección de una película hizo a Sumika sentirse irritada que incluso se molestó al decir gracias, sin embargo, ella no dijo ninguna palabra sobre eso y desvió la mirada de él.

Y entonces paró y pateó los libros raros en el suelo mientras corría a la salida de la vieja librería.

Mientras demostraba con su espalda su rechazo que no quería ver su cara de nuevo.

Sin embargo, el charlatán entrometido “Dios Maligno” le habló a la espalda de Sumika.

— Sumika-chan. Ese fuerte espíritu que está tratando de ponerse en igualdad con Homura-kun es digno de elogio, pero eso es algo imposible. No hay nadie que posea el talento necesario para contrarrestar una determinación noble como la de él… Sin Embargo, algo como eso es sólo un problema trivial. Después de todo, la verdadera fuerza de la llamada humanidad no está allí.

… No lo olvides.

—…

Mientras que escuchaba las palabras de consejo que parecían insinuar algo, Sumika cerró la puerta de la tienda.

«… Justo ahora.»

‘¿Qué puede significar?’, iba a pensar en ello, sin embargo, Sumika se lo quitó de encima despejando esa línea de pensamiento.

Este no era el momento para preocuparse por las palabras del “El Caos Reptante”.

Gritos y furiosos rugidos resonaron a su alrededor, diciéndole de la caótica situación alrededor de la esfera de vida de Tokio.

Como un mago de rango S, tenía que dirigirse inmediatamente a la primera línea.

Sumika sacó la corbata de su uniforme e intercambió su ropa a una “Chaqueta de Rey Mago” que fue modelado después como una vaquera.

Y luego, desplegó el “Air Raid” que se suministra para uso personal de los magos de rango A o superior.

Ella voló hacia el cielo nublado mirando a escondidas entre el edificio.