Sword Art Online

Volumen 7: Mother’s Rosario

Capítulo 6

Parte 1

-¡¡Ahhhhhhhh, perdimos, perdimos!!

Nori, que fue la última en volver, golpeó a Taruken en la espalda mientras gritaba alegremente.

Se encontraban en un edificio gigante en forma de cúpula delante de la plaza de la ciudad de Ronbaru, los siete fueron trasladados al Cristal de Guardado erigido en el suelo ligeramente rebajado en el centro de la habitación. Por supuesto, esto significa que fueron aniquilados por los feroces ataques del gigante Jefe negro del piso 27.

-Ugh……a pesar de que lo intentamos tan duro…

Mientras los hombros de Yuuki se hundían con consternación, Asuna la agarró de repente por el cuello.

-¿Ueh?

Asuna arrastró a la sorprendida Yuuki con ella y corrió a una de las esquinas de la habitación.

-¡Todos vengan aquí rápidamente!

Jun y los demás, que originalmente tenían la intención de volver a la posada para descansar y reflexionar sobre la lucha anterior, corrieron hacia ella con sus bocas abiertas.

No había nadie más alrededor del “Punto de Reaparición”, pero por si acaso, Asuna reunió a todos en un lugar donde no podían ser escuchados desde el exterior y habló.

-No tenemos tiempo para descansar. ¿Recuerdan a las tres personas en frente de la sala del Jefe?

-Sí, los recuerdo.

Shiune asintió.

-Son exploradores enviados por los gremios que se especializan en cazar Jefes, su objetivo es monitorear a los jugadores fuera de la alianza que los desafían. Ustedes deben haber sido vistos por ellos antes de que entraran a la sala del Jefe en el piso anterior y también en el de antes de ese.

-Eh…Ni siquiera nos dimos cuenta…

-Me temo que su objetivo no es evitar que desafíen al Jefe, sino reunir información. Esto puede ser un poco rudo, pero están usando a un pequeño gremio como los Caballeros Durmientes como un peón sacrificable para averiguar los patrones de ataque y debilidades del Jefe. De esta manera, ellos no necesitan perder experiencia debido a la penalización de muerte y también pueden ahorrar bastante del coste de pociones.

En ese momento, Taruken, que llevaba gafas, levantó su mano derecha y preguntó.

-P-pero, la puerta se cerró inmediatamente detrás de nosotros después de que entramos en la sala del Jefe. Ellos, ellos ni siquiera pueden ver nuestra batalla, ¿Entonces cómo reúnen información?

-Ese fue mi descuido…Justo antes de que la batalla terminara, noté un pequeño tritón gris retorciéndose alrededor de los pies de Jun. Eso es un “Espía” de Magia Oscura…un hechizo que invoca a un familiar que puede pegarse a un jugador designado que le permite al conjurador echar un vistazo desde el punto de vista del jugador. En el instante que se activa, un icono que indica un mal estado debería aparecer por alrededor de un segundo…

-Eh, eso es malo, no me di cuenta en absoluto.

Al escuchar la explicación de Asuna, una mirada de remordimiento cubrió la cara de Jun. Todos le dieron una palmada suave en la espalda.

-No digas eso, yo debería haberles advertido a todos de antemano. Debe haber sido mezclado cuando Shiune estaba renovando las mejoras de estado de todos justo antes de entrar en la sala. Había tantos iconos apareciendo en ese momento, así que es natural que no notaras uno extra.

-…Hablando de eso, podría ser que…

Los ojos de Yuuki se abrieron mientras apretaba las manos delante de su pecho y gritó.

-¡El que los Jefes de los pisos 25 y 26 fueran derrotados inmediatamente después de que nos aniquilaron no fue solo una coincidencia!

A pesar de que Yuuki estaba bastante sorprendida, no había ni una pizca de ira o resentimiento en su voz. Sintiendo una vez más un respeto renovado por Yuuki, Asuna asintió y respondió.

-Probablemente tienes razón. Sus ataques implacables expusieron incluso los últimos recursos de los Jefes, es por eso que fueron capaces de hacerlo de una sola vez.

-Eso, eso significa…

Shiune frunció el ceño y susurró.

-¿Esta vez hemos actuado de nuevo como peones sacrificables…?

-Cómo puede ser…

Justo cuando los hombros de los otros cinco estaban a punto de dejarse caer siguiendo el suspiro de Nori, Asuna golpeó la armadura de Yuuki.

-¡No, todavía tenemos una oportunidad!

-¿Eh…? Asuna, ¿qué quieres decir…?

-En este momento son alrededor de las 2:30 de la tarde, incluso una gran alianza tendrá dificultades reuniendo decenas de personas, probablemente tomará al menos una hora. Actuaremos ahora…… ¡Escuchen, terminaremos nuestra discusión en cinco minutos y entonces correremos de vuelta a la sala del Jefe en treinta!

-¿Ehhh……?

Incluso este grupo, formado por jugadores de primera, no pudo evitar gritar de asombro en esta ocasión. Mirando al resto de ellos a su alrededor, una sonrisa apareció en el rostro de Asuna…una sonrisa orgullosa muy similar a la de cierta persona.

-Podemos hacerlo. Y……definitivamente podemos derrotar al Jefe con solo nosotros pocos.

-¿E-en serio?

Yuuki se inclinó tan adelante que su nariz casi se estrelló contra ella, Asuna la miró y asintió.

-Todo lo que tenemos que hacer es atacar con calma su punto débil. Esta es mi estrategia. El Jefe de este piso es del tipo Gigante. Aunque sus múltiples brazos son un poco problemáticos de tratar, aún es más fácil de manejar que los atípicos que no tienen un frente o espalda reales. Sus patrones de ataque incluyen golpear con sus martillos, barrer con las cadenas de acero y una carga con la cabeza agachada. Empezará a usar un ataque de aliento de amplio rango a la mitad de su salud, y una vez que caiga al rojo incluso usará una habilidad de espada de ocho golpes utilizando sus cuatro armas…

Asuna colocó una pantalla holográfica en el suelo, cambió a la pantalla de entrada y rápidamente dibujó imágenes de los patrones de ataque del Jefe. Entonces enlistó maneras para defenderse de estos ataques.

-…Por lo tanto Jun y Thatch pueden simplemente ignorar los ataques de las cadenas de acero y centrar su atención en los martillos. Siguen sus puntos débiles…si sus martillos golpean el suelo, le tomará alrededor de 0.7 segundos para recuperarse. Nori y Taruken deben aprovechar esta apertura para usar habilidades poderosas. Además, tiene un montón de aperturas detrás de él. Yuuki puede simplemente permanecer detrás de su espalda y usar habilidades de espada del tipo carga. Aunque ten cuidado, sus cadenas también barrerán detrás de él. La manera para defenderse de su ataque de aliento…

Desde el tiempo que trabajaba como la sub-líder de los Knights of the Blood, esta era la primera vez que había hablado tanto en una reunión de estrategia. Mientras pensaba para sí misma, Asuna continuó explicándoles rápidamente su estrategia, y los otros seis asintieron mientras la escuchaban seriamente.

Asuna sentía que era casi como si fuera una profesora y rápidamente terminó la reunión de estrategia en cuatro minutos. Entonces abrió su inventario para materializar la gran cantidad de pociones que compró usando su dinero y los regalos que recibió de Lisbeth y los demás.

Todo tipo de botellas de vidrio aparecieron constantemente en el suelo con un chasquido. Asuna dividió las pociones de curación en base a la cantidad de daño que recibieron en la batalla de hace un momento y colocó las pociones de mana en su bolsa y en la de Shiune. Con eso, todos sus preparativos fueron completados.

Asuna enderezó su espalda, pasó sus ojos a través de las caras de todos una vez más, luego sonrió y asintió.

-Lo repetiré una vez más, si son ustedes…No, si somos nosotros, definitivamente derrotaremos a ese Jefe. Yo, que he luchado aquí desde hace mucho tiempo, puedo garantizarles esto.

La usual sonrisa inocente y brillante de Yuuki se extendió de inmediato a través de su cara y habló con confianza.

-Mis sentimientos eran correctos, es genial que fuéramos capaces de tenerte ayudándonos. Incluso si fallamos, estos sentimientos míos no cambiarán. Gracias…Asuna.

Los otros cinco asintieron al unísono. Shiune, que parecía ser la sub-líder, añadió con su voz clara y gentil.

-Estoy muy agradecida. Me he cerciorado una vez más de que la decisión de Yuuki de traerte aquí fue correcta, tú eres la persona que hemos esperado por mucho tiempo.

Asuna trató desesperadamente de reprimir los sentimientos que brotaban en su interior, ella levantó un dedo e hizo un guiño.

-…Palabras como esas deben dejarse para la fiesta posterior. Ahora…una vez más, ¡Hagamos nuestro mejor esfuerzo!