Sword Art Online

Volumen 7: Mother’s Rosario

Capítulo 12

Parte 1

El ligero toque en el hombro derecho del uniforme hizo que Asuna se volviera, había un ligero pétalo de cerezo allí.

Asuna usó un dedo de su mano izquierda para tocarlo. Era un pétalo en forma de óvalo sin ninguna mancha, pareciendo como si quisiera indicar algo mientras seguía moviéndose. Finalmente flotó con la brisa y desapareció entre los muchos puntos blancos bailando en el aire. Poniendo sus manos de vuelta en sus rodillas, Asuna miró al borroso cielo de primavera de nuevo.

En este momento, es el primer sábado de abril, 3 pm.

Ha pasado una semana desde que Yuuki murió y su funeral acababa de terminar. El lugar del funeral fue una iglesia cristiana rodeada por árboles de cerezo en la región montañosa de Hodogaya en la Prefectura de Yokohama y los pétalos que empezaron a caer parecían estar despidiendo a Yuuki…sin embargo, el propio funeral estuvo lejos del estereotipo de ser “solemne”. Incluyendo a la tía, que era la del luto, solo hubo cuatro familiares que asistieron al funeral. Sin embargo, hubo más de 100 jóvenes que dijeron ser amigos de Yuuki. Por supuesto, todas estas personas en su adolescencia y sus veinte eran jugadores de ALO. El pariente que aceptó las firmas en el mostrador puede haber pensado que Yuuki no tenía muchos amigos porque había estado hospitalizado durante más de tres años ya que  pareció estar completamente sorprendido por el número de asistentes.

Una vez que el funeral terminó, todos se quedaron en el gran patio en frente de la iglesia discutiendo el incidente de “Espada Absoluta”, pero la propia Asuna no podía reunirse con la multitud por alguna razón y se fue en silencio a buscar un banco detrás de las sombras del santuario de la iglesia mientras miraba hacia el cielo.

Yuuki había dejado este mundo…la Yuuki que dijo hola a través de una sonda en su hombro, la Yuuki que sonrió cuando cocinar a Asuna en la casa del bosque, se había ido a un lugar lejano y nunca volvería. Hasta ahora, ella no podía aceptar este hecho. Ella ya no estaba llorando, pero ya fuera en medio de una multitud ruidosa, el rincón de una cafetería o en los vientos de Alfheim, su corazón se aceleraba cuando le parecía oír la voz de Yuuki.

Durante los últimos días, Asuna había estado pensando en lo que significaba exactamente la “vida”.

Todas las formas de vida eran instrumentos de transferencia de genes que existían para aumentar las posibilidades de la continuidad de su propia sangre en el futuro. Hace décadas, este decir pareció haber causado una conmoción. Si fuera visto solo a través de este punto, incluso las personas que sufren de VIH en tal época, carecer de un sistema inmune o algo similar solo se considerarían una simple forma de vida. Sin embargo, este virus seguiría multiplicándose y duplicándose hasta tomar la vida de su huésped, Yuuki, causando su muerte.

Si uno lo pensara de otra manera, los humanos habían estado haciendo lo mismo durante miles de años. Tomaron las vidas de otros para su propio beneficio, sacrificaron otros países para garantizar la seguridad del suyo. Incluso cuando miró hacia el cielo, pudo ver una formación de aviones de combate volando desde la base Atsugi a un lugar desconocido, lanzando estelas blancas en el otro lado del paisaje de primavera. ¿Los humanos algún día destruirán el mundo en que existen como  este  virus? ¿O serán derrotados por algún organismo con una inteligencia mayor y serán expulsados…?